LUZ NATURAL: 2008

Equipo de monitoreo encabezado por Jans Huayca, registran al
lider de una familia de lobos en Cocha Huitoto.

De vuelta al bosque tropical del sur de Perú, el destino era la desenvocadura de un afluente del río Madre de Dios llamado Los Amigos. Aqui he pasado los siete ultimos dias de febrero recorriendo las cochas en busca de lobos de rio (Pteronura brasiliensis) como parte de las actividades de monitoreo a estos mamiferos amazónicos que la Sociedad Zoologica de Francfort lleva a cabo desde hace ya más de una decada y para la cual usa equipos multidiciplinarios. A pesar de que las riveras de los rios y de algunas "cochas" estan impactadas por la mineria artesanal, la tala ilegal y la pesca con metodos no permitidos, estos bosques siguen escondiendo ese espiritu silvestre, salvaje aun, donde la naturaleza se muestra en sus más distantes extremos, es epoca de lluvias en la selva peruana entonces el sol puede brillar con candido fulgor y unos minutos despues caerse el cielo con lluvias y vientos propios de una tormenta tropical. Los ríos, las cochas y bajillos se inundanron con la torrenciales lluvias que han caido los días anteriores a nuestra llegada, pero son estos extremos los que regulan este fragil y biodiverso ecosistema donde no solo sobrevive el mas fuerte, sino donde la vida se las ingenia para desarrollar a veces metodos curiosos por las cuales salir victorioso, donde realmente rige la ley de la selva y del ingenio. Los invito a ver algunas de las imagenes que pude lograr en estos dias metido entre lluvias y andadas en avion, auto, camion, bote a motor, a remos y demas medios para llegar y hacer el trabajo encomendado, ver a los lobos en su habita natural y poder regristra sus particulares manchas blancas del pecho la cual los identifica, ahi vamos...

Gaviotin al vuelo, buscando lugar donde pararse.

Estos son increibles pescadores, algunas veces a dos objetivos en una misma picada, estos bichitos hasta no tener su faena no se rinden.

Una tarde lisa sin nubes, los dias siguientes serian de lluvias y viento.

Pareja de Shanshos a orillas de Paniacocha.

Mimetizada con las empalizadas que se forman en las riveras del rio Madre de Dios, estas arañas han aprendido a sacarle mucho provecho.

Algunas de las caracteristicas mas saltantes del mono araña son sus largas extremidades rematadas en cuatro dedos y su habil cola prensil, las que le permiten desplazarse con suma facilidad entre los arboles.

Serpiente arborea espera a sus presas escondida entre hojas.

Suculento desayuno se dan estos pichicos, a la orilla de la cocha.

Exotica variedad de saltamontes en en el instante mismo de su apareamiento.

Pequeño caima blanco, de adulto este será uno de los predadores más peligrosos de la cocha.

A veces las chotacabras muestran tal tranquilidad, esta se daba su descanso en un rama a orillas de Cocha Huitoto.

Christian Quispe .Lalo.

laloswitch@yahoo.es

Colca es uno de esos lugares que te dejan perplejo. Estamos en la epoca de lluvias en la sierra peruana y las mañanas suelen despertar nubladas, a tal punto que es imposible divisar el rio en lo profundo del cañon.
Practicamente amaneci en el mirador panorámico que esta a unos minutos del pueblo de Cabanaconde, pueblo enclavado en lo alto del cañon y a unas seis horas de la ciudad de Arequipa en los andes del sur del Perú.

A medida que el sol empieza a subir en el horizonte se va despejando el cañon, la bruma empieza a trepar por sus laderas empujada por el viento que ya empiza a soplar, por momentos no vemos más que nubes grises a nuestro alrededor, de pronto de entre ellas aparecen las paredes oscuras del gran cañon que nos muestra pedacitos de esa inmensidad, de ese espiritu de grandeza y de pequeñez que el cañon infunde a los sentidos. Las aves por su parte son una compañia grata en esta espera, sus dulces cantos matutinos y sus alborotadas apariciones nos dejan esa sensacion de estar muy lejos de la ciudad, donde la naturaleza se desenvuelve sin obstaculos y el frio arrecia en cada bruma que pasa, donde la respiración se detiene y las palabras dejan de cobrar sentido alguno, donde cada pedacito de ese todo que aun no se dislumbra nos hace felices...